martes, 28 de octubre de 2008

Ahora (Hoy II)

No voy a negarte, que no pensé en ti como una salida, porque hasta tú sabes,lo que pienso de quienes actúan de esa manera.

Sólo se que te convertiste en el viento que ayer quise ser, en la voz que no pudo ser escuchada, en el grito desesperado que se despojaba de posturas, para suplicar que él quisiera quedarse, no conmigo, no con ella... porque aunque me dolía recordárselo, había pasado mucho tiempo desde que se había marchado.

Simplemente quería verlo continuar, correr o ir despacio, llorando o riendo, escribiendo, dibujando, con mis letras y sus partituras, sin mis letras ni sus ataduras, con sus sentimientos y con sus historias, incluso y aunque doloroso, con un pasado que le impedía ver el futuro. Con ese pasado que no era más que el preludio de tiempos mejores, que las lágrimas rebedes le impedían ver.


Tú conseguiste todo eso, y así te convertiste en razón, aunque no es tu nombre, y si no deba llamarte así, eso eres. Lo eres para mí, para él, y por supuesto para ella. Él y yo lo sabemos, no lo comentamos, pero lo sentimos.

Ahora es tu turno para dejarte acunar con historias, con notas ordenadas, con nanas y con soul, con piano y tambores, rosas y arenas. Ahora eres la musa, el motivo de las letras, la canción, la sonrisa, y hasta la cometa guiada por las manos y el amor. El amor que tambien eres tú, y que multiplica tu presencia.

Definitivamente, no puedo llamarte razón, porque eres Ahora.


PD. La entrada anterior corresponde a "HOY".

Hoy ( El origen de Ahora)

Hoy quería cumplir una promesa, pero no he podido.

Hoy quería reunir todas mis fuerzas y dejarlas en tu portal

Hoy quería llenar de colores intensos ese lienzo que lleva meses aparcado en la puerta de tu salón.

Hoy quería sentarme a discutir con el piano, y pegarle tres gritos a la guitarra, sin escucharla, por no ser capaz de decir lo que quieres oír.

Hoy recordé una vieja película que, sólo vi una vez, y me fue imposible repetirla. Igual que aquel libro del que solo leí veinte páginas cuando tenía once años, y que he querido terminarlo el resto de la vida, pero no tengo el nombre del autor. Hoy no sé bien, si la película y el libro existen, o solo fueron un chiste malo de mi imaginación, porque por mucho que intente encontrarlos, nadie ha oído hablar de ellos. Así como a nadie le puedo preguntar por ti, porque quizás sólo existes para mi.

Hoy me he sentado un rato a esperar que la lluvia pare de caer de tus ojos, que algún destello de luz te indique que ha pasado la tormenta, y te animes a volar una cometa.

Hoy he querido hacerte esa cometa, convertirme en aire y hacerla volar, hasta que seas capaz de sonreír.

Hoy que querido que de algún cajón salte una razón, con más peso que mis palabras.

Hoy quisiera saber que estás. Hoy quisiera saber que quieres estar.


Publicado el 15/01/2007